Historia

HISTORIA INICIAL DEL

TECNOLÓGICO DE CIUDAD VICTORIA.

Por: Agustín Barraza Saucedo, doctor en derecho. Jubilado.
Cd. Victoria, Tamaulipas, México, 15 de octubre de 2015.
(Permitida la reproducción total o parcial, citando al autor).

Este plantel oficialmente hoy 2015 se llama "Tecnológico de México. Campus Cd. Victoria", ello a partir del año 2013, por decisión del gobierno federal que dirige el presidente Enrique Peña Nieto y como secretario de educación pública Emilio Chuayffet.


I. NACIMIENTO DEL TECNOLÓGICO.

 

En el año 1975 la patria mexicana es gobernada por Luis Echeverría Álvarez. Entonces se inicia el último cuarto del siglo XX. La capital del Estado de Tamaulipas había sido fundada el 6 de octubre de 1750, pero luego felizmente da orto el lunes 15 de octubre de 1975 a un emporio de la ciencia y de la tecnología bienhechoras con un rango de educación superior en esta capital, tierra amada de Emilio Portes Gil. Y en aquel entonces, la poderosa Secretaria de Educación Pública le otorga un número el 38, porque otrora ella iba dando números a esos insignes planteles.


II. DECISIÓN FEDERAL Y ESTATAL PREVIAS.

 

Hacia 1975 la ex Santa María de Aguayo, hoy Ciudad Victoria, contaba con una población de 200 000 habitantes. En 2015 cuenta con más de 300 000. Pero en docencia – aprendizaje para carreras profesionales de ciencia, tecnología e investigación, ya se requería entonces urgentemente aquí un "plus ultra" para encarar los retos de crecimiento y desarrollo local y nacional. E inclusive también para enfrentar los desafíos de la globalización tan actual que entonces se acercaba impetuosa exigiendo gran calidad, competitividad, producción y valores prioritarios en alumnos, investigadores y agentes de cambio.

 

En ese ayer de 1975 ante tal panorama retador de múltiples aristas y escollos de dónde, cómo y con qué, para estudiantes del entonces CECYT 104, hoy CBTIS 24 (nivel bachillerato) de Ciudad Victoria, ellos para no emigrar, solicitan al gobernador de Tamaulipas Enrique Cárdenas González que decida fundar aquí un tecnológico para educación superior en ciencia y tecnología. El gobernador pronto lo obtiene del presidente Luis Echeverría Álvarez, cuyo poder federal a la sazón en la faz del país, estaba operando la decisión de erigir tecnológicos, y contribuye máxime además la grandísima amistad que se profesan ambos otrora mandatarios nacional y estatal por haber sido condiscípulos en la niñez en su escuela primaria LAURO AGUIRRE aquí mismo precisamente en Ciudad Victoria.


III. ANÉCDOTA INICIAL.

 

El presidente Echeverría comunica su decisión de alto nivel y la ordena para que la ejecute al secretario de educación pública Víctor Bravo Ahúja. Este, digamos se resiste diciendo "pero señor presidente, mire que ya tenemos muchos tecnológicos y con otro más nos pesarían demasiado". Ocurre felizmente que el ejecutivo nacional no admite la argumentación de Bravo Ahúja. Y este tiene que cumplir la orden dada por el criterio presidencial.

 

Con tal apoyo, raudo el gobernador aquí en Victoria compra y aporta en excelente lugar al pié de la bravía Sierra Madre Oriental, un terreno de veinte hectáreas (que equivale a la mitad de la superficie del Estado Vaticano), suficientes para el mejoramiento, crecimiento y desarrollo cultural, deportivo, de investigación, docente, profesional, posgrado, de extensión y educación a distancia.

 

Es de mencionar que la escritura pública "ad hoc" consta en la notaria pública del Lic. Juan Guerrero Villarreal (+) cuyo despacho, hoy año de 2015, está a cargo de su hijo el Lic. Juan Guerrero Zorrilla (Hidalgo 435 altos).
Con la compra del terreno, había que desmontarlo y hacer un camino desde la ciudad para poder acceder. De esta construcción vial, tosca aun, se encarga la maquinaria pesada a cargo del gobierno estatal. Aquello queda muy lodoso, me consta, pero el acceso se logra entonces.

 

Así el gobernador Enrique Cárdenas toma el acuerdo con el secretario de la SEP Bravo Ahúja, de que éste ocurra, venga para proceder aquí en el terreno a la ceremonia protocolaria y significativa de colocar la primera piedra emblemática, eso como arranque de la construcción. Tal sucede. Es junio de 1975. Caprichos del destino: para tal honor, es comisionado el ingeniero César Uscanga Uscanga, subsecretario.

 

Todavía no aparecen en la escena existencial de la vida, ni aulas, ni catedráticos, ni carreras profesionales, ni planes, ni programas, ni alumnos, ni director, ni sindicato, ni apostolado magisterial seleccionado y experimentado, ni enseñanza - aprendizaje. Todo esto sería realización y tarea ardua del grupo de paladines fundadores, principalmente de su dirigente y coordinador inicial el ingeniero químico Miguel Zepeda Sánchez, egresado del Instituto Politécnico Nacional.

 

De izquierda a derecha: el fundador del Tecnológico de Ciudad Victoria, ingeniero Miguel Zepeda Sánchez; y el precursor batallador ex gobernador Enrique Cárdenas González y su esposa Bertha del Avellano de Cárdenas González.


IV. PREVISIONES ENCAMINADAS HACIA LA FUNDACIÓN.

 

De junio a septiembre de 1975 tienen lugar las siguientes previsiones:
1. Por motivo de no tener instalaciones, ni espacio de oficinas, se pide permiso al CECYT 104 dirigido entonces por el ingeniero Alejandro Islas Helguera para que facilite un salón, mesas, sillas y máquinas de escribir, sin pagar alojamiento. Acepta.

2. Se planea un curso de inducción para futuros catedráticos que desde luego se van a necesitar, con tres guías del curso que vienen de los Tecnológicos de Ciudad Madero y de Matamoros, Tamaulipas. Duración: una semana. La asistencia es el requisito "sine qua non" para acceder a una plaza de catedrático y además reunir cierto perfil como la experiencia.

3. Por otra parte un salón más de clase es la sede para el curso inductorio. Lo conducen los ingenieros Juan Manuel Turruabiate Martínez del Tecnológico de Cd. Madero y Héctor Kenning del Tecnológico de Matamoros; aunado también el ilustre profesor Armando García Peña, de Ciudad Madero; estos guías capacitadores imprimen y exigen la calidad y el temple necesarios. Excelentes. Sabios.

4. La prensa y la radio difunden la convocatoria. Asistimos 20 o 25 profesionistas. Todos radicados aquí.

5. Inmediatamente terminado el curso un sábado, aparece el ingeniero Miguel Zepeda Sánchez. Procede sin demora él mismo a asignar puestos y plazas docentes y administrativas. El requisito para docentes: haber asistido y aprobado el curso de inducción, sin faltas. Y para todos: ejercer los valores de disciplina y obediencia. Aun no aparece el sindicato, este nace en 1977; su primer secretario general: el ingeniero José María Mancilla López.

 

 

V. GRUPO ORGANIZADO FUNDADOR.


El ingeniero Zepeda Sánchez auxiliado con dos o tres ingenieros muy jóvenes procede a distribuir las asignaturas, con número de horas bastante reducido; nada de excesos, ni privilegios.
Los alumnos: en general los mismos estudiantes de ese prestigiado plantel de bachillerato son los que integran la primera generación compuesta al inicio de 149 alumnos, en las carreras de ingeniero civil e ingeniero industrial.
El lunes 15 de octubre de 1975: Zepeda Sánchez como primer director, coordinador y organizador; que día y noche está al pendiente, fija esa fecha dichosa al fin para dar inicio a la enseñanza – aprendizaje, a la metodología, a la tecnología educativa; todo a su debido tiempo. Comienza el tecnológico de Ciudad Victoria con 149 estudiantes; 7 catedráticos y 1 directivo. Ya luego en 1976 el tecnológico es trasladado a sus propias instalaciones. Al fundador se le ve cargando incluso mesa - bancos, y haciendo faenas extras para plantar árboles.
En cuanto a los recursos humanos contratados: al llegar al término del inicial primer semestre, son catalogados como personal fundador: 37 personas, docentes, administrativos y manuales; cuyos nombres "ad perpetuam" constan en placa metálica.
Con el 15 de octubre de 1975 comienza la actuación dinámica y bienhechora de la ciencia y la tecnología superior que irradia el Tecnológico de Ciudad Victoria.



VI.- EL INGENIERO MIGUEL ZEPEDA SÁNCHEZ.


Semblanza: Es alto, muy delgado, moreno claro, con bigote recortado, ojos muy vivaces. Dinámico. En 2015 quizá tenga 72 años de edad. Oriundo de Durango. Y domiciliado en su querido Valle Hermoso Tamaulipas. Serio. Pero también bromista con sus amigos; ingeniero químico egresado en 1968 – 9 del Instituto Politécnico Nacional. Entregado responsablemente toda su vida en pro de la educación científica y tecnológica en mandos superiores. Desde el año 2010 en jubilación.

Ni el sistema de tecnológicos, ni Ciudad Victoria, ni las generaciones jamás podrán pagar su entrega, inteligencia, dedicación, prudencia, energía, a las mejores causas; principalmente su caballerosidad para tratar a la gente y a saber fundar, organizar, acrecentar y desarrollar en su momento al Tecnológico de Ciudad Victoria. Dos veces director legítimo.


Su vida es un desvelo y amor por este plantel.


Por: Agustín Barraza Saucedo, doctor en derecho. Jubilado.
Ciudad Victoria, Tamaulipas, México. 15 de octubre de 2015.
- FIN –